La querella interpuesta por Manos Limpias contra la administración concursal de Afinsa, B.T., el pasado mes de septiembre, de la que, hasta la fecha, desconocemos si ha sido admitida a trámite por el juzgado, marca un antes y un después en cuanto a poner coto a quienes actúen de manera desleal - depredadora sería un término más adecuado- en calidad de administradores de empresas que entran en concurso.
El juzgado número 4 de Gerona ha imputado a Luis Velasco Massip, administrador concursal de Cárnicas Vilaró, la mayor exportadora de carne porcina de España, por los
presuntos delitos de prevaricación, cohecho, estafa, administración
fraudulenta, trafico de influencias y uso de información privilegiada.
Además, ha sido retirado del proceso de concurso.
Algunas de las actuaciones de Luis Velasco Massip guardan un asombroso paralelismo con lo sucedido en el Concurso Afinsa, con el agravantne de que, en nuestro caso, las actuaciones presuntamente prevaricadoras de la AA.CC van en paralelo con las llevadas a cabo, presuntamente, por el magistrado del concurso, Vaquer Martín, contra el que Manos Limpias también interpuso el pasado mes de agosto una querella criminal por prevaricación.
La pregunta es: ¿Cómo puede permitir una ley (concursal), que se puedan cometer semejantes tropelías? ¿Cómo pueden tener tanto poder estos simples funcionarios? Alguien tiene que meterse a fondo con este bodrio de Ley, que no ha hecho más que daño desde que se puso en marcha, y cambiarla.
Luis Velasco Massip es el primer administrador concursal que es retirado judicialmente de
un proceso en Cataluña y el tercero en España. Esta multinacional pasó de ser
una compañía boyante hace tres años a entrar en liquidación hace sólo dos meses.
En 2009, ante el cierre del grifo de los créditos bancarios, la empresa comenzó
a tener problemas de liquidez, por lo que en marzo de 2010 decidió presentar
concurso de acreedores con un activo de 125 millones de euros y un pasivo de
alrededor de 100 millones.
En esa época, empleaba a más de 400 trabajadores y controlaba tres mataderos,
en los que sacrificaba 1.600 cerdos diarios. Su volumen de facturación se
situaba en unos 100 millones de euros anuales, cifra que mantuvo hasta el último
ejercicio.
Pero nada más presentar el concurso, comenzaron los verdaderos problemas.
Cesce, compañía de seguros de impagados con mayoría de capital público, impuso
al administrador concursal, Luis Velasco Massip, y rechazó desde el
principio el convenio de acreedores. “Resulta incoherente que una empresa de
capital público rechace un convenio al que incluso las administraciones
apoyaban, y máxime cuando ella misma nombra administrador concursal y se cambia
al cuadro directivo que había habido hasta el momento”, señala a El
Confidencial Iñaki Frade, del despacho Frade Gobeo, que ha defendido
los intereses de Cárnicas Vilaró en todo el proceso.
Porque no deja de ser extraño que mientras la Generalitat de Cataluña, la
Agencia Tributaria y la Tesorería de la Seguridad Social se adhirieron a la
propuesta de convenio, Cesce lo rechazase. La excusa para ello fue que esta
empresa era el principal acreedor, con 8 millones de euros, y que no se fiaba de
la dirección de la empresa. A ello contribuyó que el concurso se presentase con
una propuesta anticipada de convenio con 9 millones de euros de circulante. Para
el principal acreedor, ese dinero podía deberse a la acumulación de
stocks, cuando en realidad correspondía a deudas de los clientes que no
habían sido cobradas todavía.
Durante los dos últimos años y medio, sin embargo, la situación no se
clarificó. O, al menos, no dejaron que se clarificase los nuevos
administradores. En el momento de entrar en concurso, Cárnicas Vilaró y su
filial Matadero Salida 13, tenían encima de la mesa una opción de compra, aunque
estaba vinculada a que se aprobase el convenio. El pasado 28 de junio, Cesce y
tres entidades bancarias no se presentaron a la reunión de la junta de
acreedores donde debería aprobarse dicho convenio y un plan de viabilidad, por
lo que no hubo quorum suficiente. Y no hubo más remedio que ir a la
liquidación, con el despido de los más de 150 empleados que todavía le quedaban
a la sociedad.
La venta, evidentemente, también se frustró. De momento, sin embargo, todavía
existe alguna posibilidad de que la filial Matadero Salida 13, que emplea a unos
65 trabajadores, pueda firmar un convenio de acreedores que le permita seguir
subsistiendo.
Las deudas, controladas
“Cesce siempre nos manifestó que no aceptaba el convenio porque no creía en
el negocio. Que lo había estudiado y no era plausible. Nosotros no pedíamos
dinero ni línea de crédito, es decir, Cesce no había de realizar ninguna
inversión extra. Pero ni aún así accedió a firmar el convenio y comunicó que
daba por perdido el crédito”, señala a este diario Daniel Noguera,
director general de Cárnicas Vilaró.
La situación se vuelve más extraña si se tiene en cuenta que, en estos dos
años y medio, Cárnicas Vilaró siguió facturando unos 100 millones de
euros al año, el 80% de los mismos correspondientes a exportación, y, además,
no generó nueva deuda, sino que pagó puntualmente no sólo los salarios, sino
los impuestos y las cuotas a la Seguridad Social. “Empresarialmente, no le
veo ningún sentido a esa actitud. Es muy cuestionable”, subraya Noguera.
Lo curioso, sin embargo, es que comenzaron a realizarse maniobras para evitar
que la empresa fuera vendida y hubo contactos del administrador concursal con
otros empresarios que podrían estar interesados en adquirir la
multinacional. A finales de 2011, las maniobras oscuras de Velasco fueron
denunciadas en el juzgado, que es quien finalmente le ha imputado. “Lo que
queremos es conocer si se intentó beneficiar a determinados empresarios,
ya que la operación de venta no pudo llegar a materializarse. De lo que no nos
cabe duda es de que Cárnicas Vilaró ha salido gravemente perjudicada”, explica
Iñaki Frade.
El juzgado número 4 de Gerona ha imputado al administrador concursal de
Cárnicas Vilaró, la mayor exportadora de carne porcina de España, por los
presuntos delitos de prevaricación, cohecho, estafa, administración
fraudulenta, trafico de influencias y uso de información privilegiada.
Además, ha sido retirado del proceso de concurso.
Es el primer administrador concursal que es retirado judicialmente de
un proceso en Cataluña y el tercero en España. Esta multinacional pasó de ser
una compañía boyante hace tres años a entrar en liquidación hace sólo dos meses.
En 2009, ante el cierre del grifo de los créditos bancarios, la empresa comenzó
a tener problemas de liquidez, por lo que en marzo de 2010 decidió presentar
concurso de acreedores con un activo de 125 millones de euros y un pasivo de
alrededor de 100 millones.
En esa época, empleaba a más de 400 trabajadores y controlaba tres mataderos,
en los que sacrificaba 1.600 cerdos diarios. Su volumen de facturación se
situaba en unos 100 millones de euros anuales, cifra que mantuvo hasta el último
ejercicio.
Pero nada más presentar el concurso, comenzaron los verdaderos problemas.
Cesce, compañía de seguros de impagados con mayoría de capital público, impuso
al administrador concursal, Luis Velasco Massip, y rechazó desde el
principio el convenio de acreedores. “Resulta incoherente que una empresa de
capital público rechace un convenio al que incluso las administraciones
apoyaban, y máxime cuando ella misma nombra administrador concursal y se cambia
al cuadro directivo que había habido hasta el momento”, señala a El
Confidencial Iñaki Frade, del despacho Frade Gobeo, que ha defendido
los intereses de Cárnicas Vilaró en todo el proceso.
Porque no deja de ser extraño que mientras la Generalitat de Cataluña, la
Agencia Tributaria y la Tesorería de la Seguridad Social se adhirieron a la
propuesta de convenio, Cesce lo rechazase. La excusa para ello fue que esta
empresa era el principal acreedor, con 8 millones de euros, y que no se fiaba de
la dirección de la empresa. A ello contribuyó que el concurso se presentase con
una propuesta anticipada de convenio con 9 millones de euros de circulante. Para
el principal acreedor, ese dinero podía deberse a la acumulación de
stocks, cuando en realidad correspondía a deudas de los clientes que no
habían sido cobradas todavía.
Durante los dos últimos años y medio, sin embargo, la situación no se
clarificó. O, al menos, no dejaron que se clarificase los nuevos
administradores. En el momento de entrar en concurso, Cárnicas Vilaró y su
filial Matadero Salida 13, tenían encima de la mesa una opción de compra, aunque
estaba vinculada a que se aprobase el convenio. El pasado 28 de junio, Cesce y
tres entidades bancarias no se presentaron a la reunión de la junta de
acreedores donde debería aprobarse dicho convenio y un plan de viabilidad, por
lo que no hubo quorum suficiente. Y no hubo más remedio que ir a la
liquidación, con el despido de los más de 150 empleados que todavía le quedaban
a la sociedad.
La venta, evidentemente, también se frustró. De momento, sin embargo, todavía
existe alguna posibilidad de que la filial Matadero Salida 13, que emplea a unos
65 trabajadores, pueda firmar un convenio de acreedores que le permita seguir
subsistiendo.
Las deudas, controladas
“Cesce siempre nos manifestó que no aceptaba el convenio porque no creía en
el negocio. Que lo había estudiado y no era plausible. Nosotros no pedíamos
dinero ni línea de crédito, es decir, Cesce no había de realizar ninguna
inversión extra. Pero ni aún así accedió a firmar el convenio y comunicó que
daba por perdido el crédito”, señala a este diario Daniel Noguera,
director general de Cárnicas Vilaró.
La situación se vuelve más extraña si se tiene en cuenta que, en estos dos
años y medio, Cárnicas Vilaró siguió facturando unos 100 millones de
euros al año, el 80% de los mismos correspondientes a exportación, y, además,
no generó nueva deuda, sino que pagó puntualmente no sólo los salarios, sino
los impuestos y las cuotas a la Seguridad Social. “Empresarialmente, no le
veo ningún sentido a esa actitud. Es muy cuestionable”, subraya Noguera.
Lo curioso, sin embargo, es que comenzaron a realizarse maniobras para evitar
que la empresa fuera vendida y hubo contactos del administrador concursal con
otros empresarios que podrían estar interesados en adquirir la
multinacional. A finales de 2011, las maniobras oscuras de Velasco fueron
denunciadas en el juzgado, que es quien finalmente le ha imputado. “Lo que
queremos es conocer si se intentó beneficiar a determinados empresarios,
ya que la operación de venta no pudo llegar a materializarse. De lo que no nos
cabe duda es de que Cárnicas Vilaró ha salido gravemente perjudicada”, explica
Iñaki Frade.
Este economista subraya que “las demás administraciones se mostraron
dispuestas a salvar la compañía renunciando incluso a sus derechos preferentes
de cobro con muy buen criterio. Porque un trabajador en la calle le cuesta al
Estado 18.000 euros anuales, a los que hay que añadir lo que deja de ingresar
por IRPF y la Seguridad Social”.
El comité de empresa de Cárnicas Vilaró remitió una carta al consejero
delegado de Cesce, Álvaro de Bustamante, el pasado mes de junio donde le
mostraban su “incredulidad” por la actitud de la compañía “sin causa que lo
justifique”, ya que el perjudicado por el cierre no sería sólo esa compañía
acreedora, sino el Estado y, especialmente, los propios trabajadores. Ahora,sin
embargo, serán los jueces los que deberán decidir las responsabilidades penales
del administrador concursal y determinar si recibía órdenes de alguien para
beneficiar a terceros. Sin embargo, la dirección de la compañía se reserva
también la posibilidad de ejercer una acción de responsabilidad después de que
en dos años hubiese pasado de ser la primera exportadora española a
desaparecer.
(Gracias a Eva por facilitarnos el enlace a la noticia)
(Enlace a noticia)
Dice Mila:
ResponderEliminar“La pregunta es: ¿Cómo puede permitir una ley (concursal), que se puedan cometer semejantes tropelías? ¿Cómo pueden tener tanto poder estos simples funcionarios?”
Y yo digo: Seguro que este supuesto se da porque los que hacen estas leyes, ya las hacen para poder soslayarla. ¡Claro! Que a veces hay quien lo hace tan descaradamente que los “supuestos” defensores y vigilantes de esas leyes, no tienen más remedio que intervenir ante el descaro de estos ladrones o prevaricadores –al final tanto monta-
¿Cómo es posible que bajo las narices del juez Pedraz, del resto de magistrados, jueces y hasta del mismo T.S. un simple juececillo de lo concursal maneje su negocio como un vulgar pirata manejaría su barco? Y bajando un poco más el escalón, llego a los “mercaderes” de administradores concursales. ¿Es que también tienen patente de corso para llevarse lo que les en ganas? Porque si venden o reparten… hay que pensar en aquél refrán que dice: “quien parte y reparte….”
Como he dicho siempre aquí, no roba el que no puede. ¿Para qué queremos tanto vigilante, tantas leyes, tanta administración etc. Si estamos hartos de ver y de oír que quién está bien situado se lleva 100 y devolviendo 10 o aún menos ¿Se va de rositas?
Ver caso de las preferentes, el caso de las filatelias, el caso del “YERNO DE”, los casos de los altos ejecutivos de la banca, y de los políticos no digo nada porque ocuparíamos todo “el Canal Afinsa” y aún faltarían enlaces y blogs.
ResponderEliminarVoy con el siguiente:
Antes comentaba que las leyes parecen que están hechas para que quienes las conocen puedan “meter la mano” más o menos descaradamente. Y cuando la cosa se hace con descaro, es cuando ya alguien toma cartas en el asunto y comienza a revolverse la cosa. Pero a veces ni aún así, pues que más tendrán que hacer este juez de lo concursal y estos administradores para que al menos se les quite del “negocio” ¿Antes que lo dilapiden todo? ¡Jo… ¡ ¡Qué es nuestro patrimonio el que está en juego! O al menos lo que queda de él.
Y al juez de lo penal ¿Quién le tiene que decir, qué ya está bien? ¿Es que no le bastan más de 6 años para resolver un caso? Teniendo en cuenta que dicho caso “lo ha creado él”, como se está demostrando con el tiempo, alguien o algunos estamentos de estos que mantenemos tendría que tomar cartas en este asunto.
Porque digo yo: ¿Cuántas personas hay en este “Estado Bananero” que estén blindadas contra viento y marea? Sencillamente esto es para alucinar.
Y luego tenemos que ser ciudadanos civilizados…. Valiente hatajo de sinvergüenzas hay en la Administración.
Josanpe
La verdad, como bien dice Josanpe, la hartura del sistema que tienen montado unos cuantos, tirando a muchos, es de juzgado de guardia.
ResponderEliminarSé que habrá gente honesta pero es que cuando te ves salpicado por una injusticia, resulta que te vas enterando de tropecientas mil más. Muchos en este país aun siguen con la venda en los ojos, esa que le ponen los medios de comunicación.
Una vez que has abierto los ojos, ya sabes ver, leer y escuchar en algunos casos que aparecen cuando la corrupción ha invadido el mismo.
Sin ir más lejos y sin que nadie se me ofenda, la alfombrita que se ha levantado con el tema "eventos y macrofiestas". No hay dimisiones y aquí todos tan panchos.
En este país, no el único, reina el "quien no pilla, es tonto, pero tonto rematao"
¿Un juececillo dices? No subestimes Josanpe que a veces o muchas, nos sorprendemos del poder que pueden ostentar los que son la cara visible.
En fins, aun así me convenzo una y otra vez de que la justicia, EXISTE.
Un fuerte abrazo, Eva.
Cabe señalar, que este Adminsitrador Concursal, DON LUIS VELASCO MASSIP, fue querellado en Septiembre de 2011 por los Socios de las concursadas, y que ha estado imputado durante más de un año mientras seguía en su silla de Administrador Concursal, por lo que el Juez de lo Mercantil de Girona ha tardado más de un año en separarle... tiempo suficiente para que contraviniera su función como Administrador Concursal, que es velar por las empresas concursadas y su convenio, y no al revés que es la liquidación y el desempleo de todos nosotros.
ResponderEliminarTambién quiero remarcar, que el unico (o unicos porque eran 3 Administradores Concursales, y no puede ser que los demás fueran con el lirio en la mano, cuanto menos tenian que ser presuntamente cooperadores necesarios)que les beneficia personalmente la liquidación de la empresa es a ellos, que cobran su arancel que bajo no era, es más, era bocata di cardinale y mucho más de lo que nosotros cobraremos en años (imaginense, un arancel sobre 100 millones de euros que era la deuda de las concursadas).
En este caso, se ha visto que el Juez que lo llevaba ha sido demasiado lento en separarle, lo que ha conllevado que la Justicia fuera injusta, porque no puede ser que quien se supone que apoya la viabilidad de la empresa vaya en contra, intentando espantar a acreedores, y que la entidad que lo propuso, CESCE, no apoyara el convenio en perjuicio de todos nosotros, los trabajadores, y todos los acreedores.
Y como ultimas reflexiones: 1- Si CESCE que es la mitad del Estado, que se hizo con capital publico (ES DECIR: NUESTRO)para apoyar y solucionar problemas como éste, ¿por que no apoyó el covnenio? ¿Porque introdujo a este individuo para cargarselo todo?
2- El objeto Social de CESCE (compañia española de seguros de credito a la exportacion s.a), es como su propio nombre indica el asegurar impagos de acreedores: COMPAÑIA DE SEGUROS DE CRÉDITO (se encargaba de pagar a las empresas impagadas por las concursadas), ¿POR QUE NO APOYÓ EL CONVENIO? si los demás acreedores privados lo apoyaron... No puedo entender como tu negocio sea asegurar impagos (SIN ELLOS NO EXISTIRIAS!!!) no apoye el convenio. Y MÁS CUANDO NO TE IMPLICA DESDEMBOLSAR MÁS DINERO, NI PAGAR MÁS A NADIE, SOLAMENTE COBRAR MENOS (por la quita que se pacte en el convenio). ¿Por que prefirió CESCE no cobrar su totalidad en vez de cobrar la parte que todos los demás apoyaban? Supongo que estas preguntas las tendrían que responder su Director del Área de Operaciones por Cuenta Propia que es Luis Antonio Ibáñez quien un día antes del día de la Junta de convenio nos mandó un Burofax diciendo que no había tenido tiempo para pactar su adhesion... ¿Cabe mayor desfachatez? o a su Jefa de Unidad de Recuperaciones que es Maria González Portillo, que nunca se preocupó lo más minimo del convenio...
No sabemos si tenían ajustes de cuentas personales, lo que sabemos es que esta gente que controla nuestro dinero (por que es capital público), en la epoca que estamos que no tenemos dinero, por no querer simplemente dar un SI a un empresa QUE NOS DA TRABAJO (mejor: NOS DABA) y contraloando un dinero que NO ES SUYO, dijeron que NO al convenio sin ni siquiera intenatar pactar lo mas mínimo.
Realmente espero que se destituya a esta gente porque con gestiones como la suya no me extraña como va el Estado Español.
Finalmente, espero como español que soy, que si la empresa hubiera sido de Madrid y no de Catalunya hubieran hecho lo mismo...
Estimado y leído anónimo:
ResponderEliminarEstimado, por entrar aquí y contar algo del caso y leído porque ya lo hice.
Para empezar no comprendo cómo pones en mayúscula el nombre de tamaño pirata, ladrón, golfo y no sigo porque de lo contrario no publicarían mi comentario.
Debieras poner el nombre así: “el trápala Luis Velasco Masip”, -que fue administrador concursal” posiblemente se llevó una buena pasta de un negocio que se suponía que tenía que defender y sanear o volver a sacar a flote, etc.
Por favor, no les demos a estos canallas un tratamiento que han perdido desde el mismo momento en que ellos mismos se ha descalificado, quedando cómo vulgares rateros.
Josanpe